
sin saber por qué, me levanté de un golpe, llorando. clavé la mitad de mis garras en el futón y la otra mitad en el brazo de paul. él, todavía dormido, me dijo con voz de máquina: "dai-jo-bu-dai-jo-bu". cuando lo oí hablarme en japonés, me desperté.
明くる日:
yoko sensei me dijo hoy que el mundo no gira alrededor de uno. ¿por qué siento que esta verdad de perogrullo me perfora el alma?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario